Los alimentos con harina de trigo en Chile son muy bien recibidos, y en su percepción gastronómica, la Marraqueta no podría ser mejor vista. Siendo, de hecho, considerada como el pan más vistoso y pedido de los chilenos.
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Una nueva manera de elaborar el pan

¿Cuál es la historia de la marraqueta?

No se ha establecido un origen claro entorno a la marraqueta, aunque podemos relatar cuáles son las tres versiones más sonadas del génesis de este pan.
La primera versión nos hace viajar unos siglos atrás, concretamente a mediados del siglo XIX, siendo en esos momentos cuando un francés botánico de nombre y apellido Claudio Gay, opinó que la Marraqueta se habría empezado a elaborar en el siglo anterior.
Sin embargo, surgió Benjamín Vicuña, para oponerse a esta opinión. Y afirmó que la creación de este tipo de pan se produjo en 1810; dando indicaciones exactas sobre la calle y el nombre del dueño de la panadería, donde, en palabras suyas, nace la Marraqueta. 
Por otra parte, la última versión más reconocida nos dice que este pan ya existía y se consumía en Chile desde los tiempos de la independencia.
Narrándonos, a modo de leyenda, la historia de dos hermanos que migraron desde Francia hasta el país chileno, que decidieron crear este plato. Algo que explicaría el hecho de que le llamaran «pan francés».

¿Por qué tanta popularidad?

La marraqueta es el pan más famoso de Chile. El mismo, está hecho a base de harina de trigo, levadura y sal. Parece algo simple para tener tanta popularidad, ¿no?
Pues, con este escaso número de ingredientes se ha convertido en el favorito de los desayunos chilenos; siempre acompañado con una buena taza de café o chicha fría, y caracterizándose por su simple pero gran sabor y su forma crujiente. 
Siendo bien visto incluso por los nutricionistas, quienes lo recomiendan debido a los aportes de sodio que genera en el consumidor. Además de su baja cantidad de azúcares, grasa y carbohidratos.