Orígenes
Como es de esperarse, el consumo de la lengua de res no es algo reciente, de hecho es todo lo contrario.
Y es algo que ha estado sucediendo desde el periodo Paleolítico, momento en el cual los cazadores aprovechaban de alimentarse de las partes que poseyeran más grasa, como el cerebro, médula y por supuesto, la lengua de los animales.
Consumo internacional
Así como forma parte de la gastronomía chilena, también tiene un lugar en la cocina de otros países latinoamericanos, así como en algunos del continente europeo y el asiático.
Variando en nombre, como en el caso de Corea donde se denomina «hyeomit gui», o Perú, donde se conoce como «lengua estomatada». Al igual que en forma de preparación.
Por ejemplo, mientras que en Argentina se elabora en escabeche o a la vinagreta, en México se le emplea como relleno de tacos o burritos; y en Turquía se sirve como sopa o ingrediente en un sándwich.
Aportes
Hay muchos beneficios que se obtienen del consumo ocasional y sin exagerar, de la lengua de vaca; ―debiendo hacer un recordatorio sobre este punto en cuestión, pues cuando conozcas todos tus aportes, querrán incluirla en tu dieta automáticamente―-.
Uno de ellos es su alto contenido en vitaminas del complejo B, y minerales como el cobre, hierro, magnesio, potasio, zinc, entre otros. Los cuales brindan una protección adicional a la piel y al sistema inmune, mientras generan insulina.
Sin embargo, no todas sus propiedades son completamente sanas. De hecho, es extremadamente grasosa, ante lo cual es cuestión que observo con lo que veo.