¿Qué es?
También llamada «pangue», la nalca es una planta comestible, cuyos ejemplares puede encontrarse en Argentina, y en Chile ―donde suele usarse para fines culinarios―.
En cuanto al significado de su nombre, se dice que «nalca» proviene de la palabra en mapuche «nalka» y «ngalka» que se refiere a su «lugar comestible».
Historia de la planta
La historia de la nalca chilena no está muy clara. Sin embargo, entre expertos en botánica se comenta que el género de esta planta data de la era glaciar, y que comenzaría a cultivarse muchos años después. Asombroso ¿cierto?
Pero eso no es todo, pues expertos suponen que el género pasaría por muchísimas etapas en su proceso de evolución; dando como resultado varios tipos de planta con el pasar de las generaciones.
Y según sus cálculos, la Nalca que se encuentra en Chile no debería ser muy antigua, a comparación con el origen de su género.
Por lo tanto, contando con estos datos los historiadores interesados en la incógnita de la nalca, han llegado a la conclusión de que se empezaría a cultivar en Chile gracias a los nativos mapuches.
Y a pesar de que se desconoce cuál fue el uso exacto que le dieron, no deja de ser uno de sus múltiples aciertos. ¡Bravo!
¿Para qué sirve?
En el país chileno, la Nalca suele ser utilizada para temas culinarios. De hecho, mientras que sus hojas se emplean en la elaboración del Curanto; su peciolo normalmente se emplea en la preparación ensaladas, y también como ingrediente acompañante en jugos, jaleas y tartas.
Pero, eso no es todo, pues también es usada con fines medicinales, ya que relaja los músculos, ayuda a regular el dolor de la menstruación en mujeres y combate la fiebre, así como los dolores estomacales.
